Alirio Díaz |
Un día como hoy en el año 1923, en el
caserío La Candelaria, cercanías de Carora, Estado Lara, nació Alirio Díaz, genio venezolano, virtuoso y destacado de la guitarra clásica
en Venezuela y unos de los más notables a nivel internacional.
Culminados sus estudios primarios, se
muda al Estado Trujillo, donde comienza sus estudios académicos musicales,
aprendiendo a tocar el saxofón y el clarinete. Entra a trabajar en la banda
municipal que dirigía Laudelino Mejías, lo cual le permite estudiar la
guitarra, aprender el inglés y tipografía. En 1945, se muda a Caracas
ingresando en la Escuela Superior de Música José Ángel Lamas.
Viaja a España en 1950 con una beca
del gobierno venezolano para estudiar en el Conservatorio de Madrid donde
conoce a Andrés Segovia, de quien se convierte en su asistente y luego su
sustituto en los cursos de guitarra. A partir de ese momento inició sus
actividades como concertista por toda Europa y el mundo.
Durante estas actividades Alirio Días fue tomando
conciencia del alto valor de las manifestaciones musicales populares, en sus viajes a Venezuela
dedicaba gran parte de su tiempo a la recopilación de cantos de origen popular,
muchos de los cuales, luego de cuidadosas armonizaciones guitarrísticas eran -y
siguen siéndolo- interpretadas ante públicos de todo el mundo, internacionalizando la música de guitarra de compositores venezolanos como Vicente Emilio Sojo, Antonio Lauro e Inocencio Carreño, entre otros.
Finalizando una entrevista sobre su origen y su vida, dijo: “Yo no puedo abandonar la guitarra porque ella está dentro de mí, camina en mis zapatos y respira en mi pecho. Si yo quisiera dejarla no podría porque sería ella la que no me abandonaría. Eso equivale a preguntarme si en todos esos años en Europa yo dejé, por un instante, de ser un ciudadano de La Canducha (así le dice al caserío La Candelaria donde nació). Y cómo. Un hombre no puede colgar el alma”.
Alirio Díaz murió el día 5 de julio de 2016, en la ciudad de Roma, Italia. Tenía 92 años de edad.
Finalizando una entrevista sobre su origen y su vida, dijo: “Yo no puedo abandonar la guitarra porque ella está dentro de mí, camina en mis zapatos y respira en mi pecho. Si yo quisiera dejarla no podría porque sería ella la que no me abandonaría. Eso equivale a preguntarme si en todos esos años en Europa yo dejé, por un instante, de ser un ciudadano de La Canducha (así le dice al caserío La Candelaria donde nació). Y cómo. Un hombre no puede colgar el alma”.
Alirio Díaz murió el día 5 de julio de 2016, en la ciudad de Roma, Italia. Tenía 92 años de edad.
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